1114. Génesis
Capítulo Diez
De la Iglesia Antiquísima que se llama Hombre o Adán
Los ángeles y los espíritus, o sea hombres después de la muerte, pueden encontrar a todos aquellos a quienes han conocido en el mundo y de quienes han oído hablar, lo que quieran, verlos como presentes y hablarles, cuando el Señor lo concede. Y, lo que es admirable, aparecen inmediatamente y están muy presentes. Así está permitido hablar no sólo con los amigos, que cuanto a la mayoría, se encuentran; sino también con otros que han sido estimados y venerados. Por la Divina Misericordia del Señor, se me ha concedido hablar no sólo con los que me eran conocidos cuando vivían en el cuerpo, sino, también, con los que en la Palabra eran más afamados que otros. Así también con los que fueron de la Iglesia Antiquísima, que fue la que se llama Hombre o Adán, y también con algunos que fueron de las iglesias posteriores a ella, para que yo supiera que por nombres, en los primeros capítulos del Génesis, se entienden sólo iglesias, y también para que supiera qué hombres fueron de las iglesias de aquellos tiempos. Por lo tanto, lo siguiente es lo que se me ha dado a conocer con respecto a las Iglesias Antiquísimas.


